En medio de intensas búsquedas, buceadores recuperaron una de las cajas negras del avión de la compañía Sriwijaya Air desaparecido el fin de semana pasado en las costas del mar de Java.
El hallazgo podría esclarecer lo sucedido luego de que el Boeing 737-500, que trasladaba 62 personas a bordo, se precipitara abruptamente alrededor de 3000 metros en menos de un minuto. Fue poco tiempo después de partir del aeropuerto de Yakarta. Las autoridades no han dado ninguna pista sobre las posibles causas del accidente de la aeronave.
“El FDR (Flight Data Recorder) fue hallado”, anunció hoy el ministro de Transportes, Budi Karya Sumadi.
Según consignó la agencia AFP, los investigadores recibieron una fuerte señal y enviaron a los buceadores, que lograron dar con la caja tras una hora de búsqueda. Los datos podrían estar disponibles en el rango de “dos a cinco días”, precisó Soerjanto Tjahjono, jefe de la agencia de seguridad de Transportes.
En el momento, unas 3600 personas trabajan para rescatar lo antes posible los restos de las personas que viajaban en el vuelo, así como restos del avión y las cajas negras del aparato. Un robot submarino y radares ayudan en la labor de los buzos.
Las imágenes difundidas por la marina mostraron a los buzos nadando en medio de restos, con decenas de barcos y helicópteros presentes en la zona.
Las autoridades han pedido a los familiares de las víctimas que donen muestras de ADN para ayudar en la identificación. Un total de 62 personas, entre ellas 10 niños, todos indonesios, estaban a bordo del avión que se dirigía a Pontianak, en la isla de Borneo.
Nurcahyo Utomo, investigador de la agencia local de seguridad de transportes, indicó que la tripulación no había emitido ninguna señal de socorro antes del accidente. Los datos preliminares sugieren que es muy probable que el avión estuviera intacto en el momento en que impactó en el agua.
El jefe de los servicios de rescate Soerjanto Tjahjono confirmó esta hipótesis, subrayando que los restos se encontraban en una zona poco extendida, en lugar de estar desperdigados como ocurre en caso de explosión en vuelo. “El tamaño (de la zona) corresponde a la hipótesis según la cual el avión no explotó antes de llegar al agua”, afirmó.
Según especialistas en aviación, los datos del vuelo indican que el aparato se desvió drásticamente de su trayectoria prevista antes de caer bruscamente, y alertan de que la investigación sobre las causas del accidente podría llevar meses.
Este es el primer accidente mortal que registra Sriwijaya desde el que se creó la compañía, en 2003, pero el sector del transporte aéreo de Indonesia ha registrado varias tragedias en los últimos años y varias compañías aéreas del país tenían prohibido viajar a Europa hasta 2018.
En octubre de 2018, 189 personas murieron en el accidente de un Boeing 737 MAX explotado por Lion Air que se accidentó en el mar de Java, doce minutos de después de despegar de Yakarta.
Un accidente que afectó al mismo modelo de avión en Etiopía llevó a la inmovilización durante meses de este tipo de aparato y al cuestionamiento del fabricante.