“Se acabó la verdad histórica”, aseguró hoy Alejandro Gertz Manero, fiscal general de la República, tras señalar que ayer se obtuvieron 46 nuevas órdenes de aprehensión por el caso Ayotzinapa. También dijo que se han enviado nuevos restos a la Universidad de Innsbruck para su identificación, además de que ya se solicitó la colaboración de la Interpol para localizar y detener al que fuera el titular de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón de Lucio, quien huyó de México.
#EnVivo Mensaje a medios del Titular de la Fiscalía General de la República. https://t.co/QMWx5mTsMK
— FGR México (@FGRMexico) June 30, 2020
El Ministerio Público Federal solicitó y obtuvo de un juez federal 46 órdenes de aprehensión contra servidores públicos de diversos municipios del estado de Guerrero, que presuntamente están involucrados en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Gertz Manero anunció que estas acusaciones son por los delitos de desaparición forzada y delincuencia organizada, por hechos que no habían sido investigados ni judicializados por las anteriores administraciones de la extinta Procuraduría General de la República.
Asimismo, en un mensaje a medios, el titular de la Fiscalía General de la República anunció que durante su gestión -a partir de 2019- se iniciaron nuevas investigaciones y que las diligencias realizadas han permitido establecer la cronología de lo sucedido y la participación de quienes cometieron la privación ilegal de la libertad de los 43 normalistas y su posterior desaparición.
“Ya se han enviado a la Universidad de Innsbruck en Austria restos que fueron encontrados en esta nueva administración sobre los cuales se esperan resultados de inmediato”, dijo Gertz Manero.
Anunció que se espera que hacia el fin de semana se pueda judicializar a otros funcionarios de diversos niveles, así como para dar información sobre los restos humanos que fueron enviados a la Universidad de Innsbruck con referencia a los sitios en que fueron encontrados en diligencias absolutamente apegadas a derechos humanos.
Con información de: La Jornada