El Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo (ConMéxico), que representa a 44 principales productores de alimentos, bebidas y productos de higiene personal, pidió posponer la entrada en vigor de la Norma -051 para eliminar la presión adicional para la industria alimentaria en medio de la crisis sanitaria del coronavirus covid-19.
“Resulta muy oneroso implementar y cumplir con la fecha de su entrada en vigor en octubre próximo ya que la nueva norma implicará el reetiquetado de más de 800,000 productos que requieren del concurso de nutriólogos, ingenieros de alimentos diseñadores, imprentas, etc., los cuales no están operando normalmente y esto es un gran reto para las empresas”, señaló Jaime Zabludovsky, presidente de ConMéxico en una conferencia virtual.
Zabludovsky aseguró en su participación en la conferencia virtual “El Papel de las Cadenas Comerciales en la Atención de la Crisis”, organizada por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), que el impacto será mayor para las casi 30,000 micro y pequeñas empresas que se encuentran enfocadas en mantener su plantilla laboral y servir a sus consumidores.
La Norma Oficial Mexicana NOM-051 que modifica y hace más estricto el etiquetado de los alimentos procesados y las bebidas no alcohólicas preenvasadas entrará en vigor el próximo 1 de octubre, luego de su publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el pasado 28 de marzo.
Esta norma ha creado una polémica entre empresarios y gobierno e incluso han hecho este llamado a las autoridades sanitarias a posponer la entrada en vigor de esta norma por lo menos un año ante la crisis económica que está causando la pandemia de coronavirus en el mundo y que impactará en el país.
“La crisis económica está generando presiones, como en mucho otros sectores, nuestra industria está integrada globalmente por lo que la depreciación del tipo de cambio esta afectando la estructura de costos y además esta presionada por las inversiones que garantizan la higiene de las instalaciones y salud de trabajadores. La cadena sectorial va desde el campo al anaquel con muchos eslabones y algunos de ellos muy débiles, como son los pequeños agricultores y tienditas de la esquina, que dependen de pagos oportunos y de condiciones de liquidez que les permitan enfrentar las dificultades derivadas de la pandemia”, explicó el representante de ConMéxico.
Zabludovsky añadió que la industria es de las más importante en el país ya que representa casi la tercera parte del PIB manufacturero y el 5% del PIB total de México.
“Somos el segundo generador de empleos directos y si sumamos el millón de clientes como son autoservicios, tienditas y las plataformas digitales, llegamos a más de 2 millones de trabajadores. Somos los que compramos el 75% de la producción argopecuaria y, dentro del gasto de las familias, los productos de este sector representan el 52% del gasto”, agregó.
Regular los plásticos también ayuda
El presidente de ConMéxico indicó que es necesario contar con un marco regulatorio que se adapte a la crisis sanitaria y a las previsibles consecuencias económicas a la misma, que sea adecuado y flexible, para minimizar los costos de la crisis.
Por ello, también exhortó a las autoridades a que la regulación de los plásticos debe de fincarse en los principios de la economía circular y no en las prohibiciones.
“Los plásticos juegan un papel importante en la inocuidad, pues muchos de los alimentos y bebidas que llegan al consumidor lo hacen en envases de plásticos. Muchos países están revisando sus regulaciones revirtiendo la prohibición de bolsas y contenedores para transportar alimentos pero más que relajar regulaciones hay que diseñarlas correctamente para cuidar al medio ambiente, generar mercados competitivos y maximizar beneficios a consumidores”, puntualizó.
Con información de: Forbes