Realizan primera audiencia del juicio contra Emilio Lozoya

Este martes se llevó a cabo la primera audiencia del juicio contra el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, en lo que el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que sería un “parteaguas” en la lucha contra la corrupción.

Lozoya dijo mediante sus abogados que había sido “utilizado” por un “aparato organizado del poder” durante los presuntos hechos de corrupción en su periodo al frente de la compañía, que transcurrió de 2012 a 2016.

Emilio Lozoya no identificó al grupo, pero sus palabras parecieron insinuar que está listo para contarlo todo sobre los principales funcionarios del gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto. La audiencia no estuvo abierta al público.

De acuerdo con un resumen informal de la sesión proporcionado por el sistema judicial, los abogados de Lozoya dijeron que no argumentarían contra la solicitud de la fiscalía al juez en torno a que Lozoya sea detenido para ser juzgado por cargos de lavado de dinero. Lozoya ha acordado cooperar con los fiscales y actuará como testigo protegido a cambio de posibles reducciones de sentencia o una eliminación de los cargos.

Lozoya reiteró su “compromiso de colaborar con las autoridades del Estado mexicano”, según el resumen. Sus abogados alegaron que “fue utilizado en su calidad de instrumento no doloso” por otros, aun cuando presumiblemente él utilizó mucho del dinero de los sobornos para comprar casas para él y su familia.

El exdirector de Pemex comentó al tribunal que era inocente de los cargos y que lo probaría. Huyó de México, pero en febrero, la policía española lo arrestó en la ciudad de Málaga y fue extraditado a México hace unas semanas.

López Obrador dijo que el juicio contra Lozoya representa “un antes y un después” en lo que el mandatario describe como la principal prioridad de su gobierno: la lucha contra la corrupción.

 

El tribunal inició con los procedimientos el martes a través de un enlace de video debido a las restricciones implementadas por la pandemia de coronavirus y al hecho de que Lozoya ha estado internado en un hospital por afecciones preexistentes.

Lozoya dijo que fue “sistemáticamente intimidado, presionado, instrumentalizado”, pero no dijo por quién. Se ha conjeturado que pudo haber sentido presión para recaudar fondos para la campaña presidencial.

La constructora brasileña Odebrecht, que ha sido investigada en toda la región en los últimos años por conseguir grandes contratos gubernamentales mediante sobornos generosos, supuestamente le dio a Lozoya 4 millones de dólares para la campaña presidencial de 2012 de Peña Nieto, predecesor de López Obrador.

La audiencia se centró en los cargos de un caso de 2013 en el que una empresa mexicana, Altos Hornos de México, vendió a un precio inflado una planta vieja de fertilizantes a Pemex, luego de supuestamente haber pagado a Lozoya alrededor de 3,4 millones de dólares en 2012. De acuerdo con los fiscales, el dinero terminó en cuentas bancarias controladas por Lozoya y su hermana, quienes utilizaron la mayor parte del dinero para comprar una casa en un exclusivo vecindario de la Ciudad de México.

Lozoya dijo que había declarado la propiedad como está requerido en los formularios de auditoría que los funcionarios públicos deben entregar, pero los fiscales señalaron que trató de esconder los pagos y la transacción.

Los fiscales señalaron que Lozoya presionó por la compra de la planta de fertilizantes, incluso cuando era más barato construir una nueva.

López Obrador dijo que el nuevo propietario de esa compañía mexicana ha ofrecido reembolsar hasta 200 millones de dólares relacionados con la compra. El presidente dijo que México espera recuperar parte del dinero de los sobornos y de los contratos oscuros. El mandatario criticó el hecho de que los casos de corrupción en México a menudo se desarrollen en los tribunales estadounidenses, y que el dinero recuperado en esos casos se quede frecuentemente en Estados Unidos. Dijo que ha dado instrucciones a los diplomáticos mexicanos para que traten de que una parte se destine a México.

Odebrecht supuestamente aportó otros 6 millones de dólares una vez que Peña Nieto llegó al cargo. Al parecer, parte de ese dinero se usó para sobornar a legisladores federales para que aprobaran un paquete de reforma energética, conocido como Pacto por México, que abrió el sector energético del país a una mayor inversión privada.

La semana pasada, López Obrador dijo que era importante que “el señor Lozoya esté dando a conocer que hubieron estos sobornos y que se usó dinero para comprar la reforma energética. Y que se repartió dinero a legisladores de partidos”. Él se había opuesto a la reforma energética.

El presidente dijo el martes que el juicio “va a ayudar mucho, repito, a que se destierre la corrupción en México”. Señaló que los sobornos son un problema más grande para México que la pandemia de coronavirus.

“Estoy convencido de que es el principal problema de México. No es una pandemia… es una peste”, afirmó López Obrador.

Comparte este post:

Facebook
X
LinkedIn
Pinterest
WhatsApp

¡Hazte escuchar! Publica tu anuncio aquí

Anúnciate aquí (365 x 270)
Noticias recientes