El Dr. Michael Ryan, en una sesión especial de la junta ejecutiva de 34 miembros de la OMS centrada en COVID-19, dijo que las cifras varían de áreas urbanas a rurales y entre diferentes grupos, pero que en última instancia significa “la gran mayoría de los el mundo sigue en peligro”. Dijo que la pandemia seguirá evolucionando, pero que existen herramientas para suprimir la transmisión y salvar vidas.
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— World Health Organization (WHO) (@WHO) October 5, 2020
“Se han evitado muchas muertes y se pueden proteger muchas más vidas”, dijo Ryan. Estaba flanqueado por su jefe, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien minutos antes dirigió un momento de silencio para honrar a las víctimas, así como una ronda. de aplausos para los trabajadores de la salud que se han esforzado por salvarlos.
Ryan dijo que el sudeste asiático enfrentaba un aumento en los casos, Europa y el Mediterráneo oriental estaban experimentando un aumento, mientras que las situaciones en África y el Pacífico occidental eran “bastante más positivas”. En general, sin embargo, dijo que el mundo “se encamina hacia un período difícil”.
“La enfermedad continúa propagándose. Está aumentando en muchas partes del mundo”, dijo Ryan a los asistentes de los gobiernos que conforman la junta ejecutiva y proporcionan gran parte de los fondos de la OMS. “Nuestras mejores estimaciones actuales nos dicen que alrededor del 10 por ciento de la población mundial puede haber sido infectada por este virus “.
La estimación, que ascendería a más de 760 millones de personas sobre la base de una población mundial actual de alrededor de 7,6 mil millones, supera con creces la cantidad de casos confirmados contabilizados tanto por la OMS como por la Universidad Johns Hopkins, ahora más de 35 millones en todo el mundo. Los expertos han dicho durante mucho tiempo que el número de casos confirmados es muy inferior a la cifra real.
Ryan no dio más detalles sobre la estimación. La Dra. Margaret Harris, portavoz de la OMS, dijo que se basa en un promedio de estudios de anticuerpos realizados en todo el mundo. Dijo que el estimado 90 por ciento de las personas que permanecen sin infección significa que el virus tiene “la oportunidad” de propagarse más “si no tomamos medidas para detenerlo”, como mediante el rastreo de contactos y el seguimiento de casos por parte de los funcionarios de salud.
Tedros, durante sus comentarios, dijo: “Lo que hemos aprendido en todas las regiones del mundo es que con un liderazgo sólido, estrategias claras e integrales, una comunicación constante y una población comprometida, empoderada y capacitada, nunca es demasiado tarde… Cada situación se puede revertir, y las ganancias obtenidas con tanto esfuerzo pueden perderse fácilmente “.
“La pandemia subraya la importancia fundamental de invertir en salud pública y atención primaria de salud”, dijo Tedros, que llevaba una elegante máscara negra, roja y amarilla. Tedros no había usado una máscara durante decenas de conferencias de prensa sobre el COVID-19 que dirigió en la sede de la OMS. este año.
Los comentarios se produjeron durante una sesión especial de la junta ejecutiva para considerar el seguimiento de su reunión anterior, en mayo, que aprobó una resolución para analizar la respuesta del mundo y de la OMS a la pandemia, entre otras cosas.
La reunión de dos días es la primera de la junta ejecutiva desde que la administración Trump inició una cuenta regresiva de un año este verano para sacar a Estados Unidos de la OMS en julio próximo. El presidente Donald Trump, quien ha sido infectado por el COVID-19, ha acusado repetidamente a la OMS de aceptar demasiado las explicaciones de China sobre su manejo del brote en Wuhan a fines del año pasado.
En un tono mucho más conciliador, el subsecretario de Salud Brett Giroir, representante de Estados Unidos en la junta, dijo en la reunión por videoconferencia que Estados Unidos “espera trabajar juntos para derrotar esta pandemia y hacer que nuestra gente y nuestra economía vuelvan a la normalidad. “
Giroir también presionó a la OMS, aunque con suavidad, para que aclarara su relación con el gobierno chino. Dijo que un “mandato clave” de la resolución de mayo era su llamado a una misión conjunta que involucrara a la OMS, la Organización Mundial de Sanidad Animal y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación para investigar los orígenes animales del virus y su transmisión a humanos.
Un equipo de avanzada de dos personas para esa misión ha visitado China, pero no está lista una misión más completa. Giroir dijo que es “fundamental” que los estados miembros de la OMS reciban actualizaciones periódicas y oportunas sobre la misión y sus “términos de referencia”, una alusión a las directrices de trabajo que detallan cuánto acceso tendrán los miembros de la misión en China.
El miembro de la junta china, Zhang Yang, hablando por videoconferencia, dijo que China ha sido “transparente y responsable” y ha estado cumpliendo con sus responsabilidades bajo la resolución. Dijo que se había estado comunicando regularmente con la OMS y cumpliendo con sus compromisos financieros con la agencia de la ONU.
El miembro de la junta, Clemens Auer de Austria, lamentó un “debilitamiento político” de la OMS, citando la “posible retirada de un estado miembro fuerte de la OMS”, una alusión a los Estados Unidos. Pidió una “sesión de retirada” para los miembros de la junta, diciendo que debería ser un cuerpo “activo”, no uno “ceremonial”. El representante de Estados Unidos, Giroir, expresó su apoyo a esa idea.
Con información de: ABC News
