En el marco del Ciclo de Conferencias y Mesas de Diálogo “Ciencia por México”, se desarrolló este miércoles en el Conacyt la mesa Reforma Administrativa y Gobierno en CTI, con la participación de destacados investigadores en ciencias jurídicas y académicos como la Dra. Margarita Palomino Guerrero, responsable de Vinculación Intrainstitucional del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM y el Dr. José Roldán Xopa, investigador del Centro de Investigaciones y Docencias Económicas (CIDE), quienes reflexionaron sobre el rumbo de la Ciencia, Tecnología e Innovación desde la perspectiva gubernamental y administrativa.
En representación de la Dra. Elena Álvarez-Buylla, el Mtro. Raymundo Espinoza Hernández, titular de la Unidad de Asuntos Jurídicos del Conacyt, señaló que en el sector de CTI se encuentra en un momento crucial de transformaciones institucionales, tanto a nivel normativo como de política pública, que impactará en la administración y gobernanza del propio sector.
Durante el arranque de la mesa, la Dra. Margarita Palomino Guerrero, especialista en Derecho Fiscal, declaró que “el objetivo de las leyes es que resuelvan problemas” por lo que resulta indispensable que previamente se investiguen y analicen los factores que detonan las distintas problemáticas del país. Tras recordar algunos casos de políticas públicas fallidas ocurridas en el pasado, mencionó que muchas veces el error estaba en que las decisiones se tomaban desde un centro que desconocía la realidad social en las periferias, en las comunidades.
Afirmó que uno de los grandes retos consiste en acercar a la ciencia, la tecnología y la innovación a las necesidades reales de México. Consideró que de nada sirve la generación de nuevas líneas de investigación si éstas no se enfocan, de manera conjunta, en solución de problemáticas. “En las Ciencias Sociales tenemos que demostrar, a partir de la razón, que las respuestas se apliquen directamente a la problemática social y que se resuelva o, bien, que identifiquemos cuáles son los factores que lo detonan”.
Posteriormente, sugirió que el Conacyt debía emprender tres acciones simultáneas: convocar, jerarquizar y evaluar. Esto es, convocar a los mejores especialistas en una problemática para definir, a través de foros de reflexión, sus posibles causas y soluciones. Asimismo, sugirió como necesario que se jerarquicen las necesidades, es decir, identificar los rubros fundamentales en los que se debe actuar. Finalmente, se refirió a la impronta de evaluar las acciones. Se refirió, como ejemplo, a los becarios que el Conacyt envía al extranjero. Dijo que era prioritario hacer un censo de los estudiantes para saber cuántos de ellos regresan y de qué manera contribuyen al país.
En tanto, el Dr. José Roldán Xopa, Doctor en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y autor de obras como La Ordenación Constitucional de la Economía, planteó la necesidad de crear en México una “inteligencia social”, impulsada desde las instituciones del Estado. A manera de ejemplo, mencionó el caso de los países en donde prevalece una buena calidad de vida y dijo que “son consecuencia de que tienen los mejores Estados, las mejores instituciones”. Propuso, además, que se articulen y organicen las inteligencias sociales de México como si fueran redes neuronales para la conformación de instituciones inteligentes: “esto lo vinculo con la democracia, es decir, la democracia en ciencia y tecnología no la entiendo como para que nos juntemos y votemos por algo, sino que nos reunamos y aportemos conocimientos e inteligencias para resolver problemas sociales”.
En este contexto, el jurista sostuvo que no puede existir inteligencia si hay exclusión de conocimientos, perspectivas y saberes. Contempló la posibilidad de conjuntar, en el caso de investigaciones médicas, conocimientos tradicionales indígenas con los proyectos emprendidos por los laboratorios de la UNAM en cuestiones de Biotecnología y Medicina Genética, de tal manera que se logre romper con el esquema de “aislacionismo”.
Subrayó que el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología tiene una función relevante como entidad responsable de comunicar entre instituciones de investigación que hacen economía, derecho y administración pública entre sí. Concluyó que uno de los grandes errores que se han cometido en el país es el “eterno comienzo” de cada seis años en el sector de ciencia y tecnología, que demanda políticas y programas de largo aliento.
El Ciclo de Conferencias y Mesas de Diálogo “Ciencia por México” continuará realizándose en el auditorio “Eugenio Méndez Docurro” del Conacyt hasta diciembre del presente año, todos los miércoles a partir de las 11:00 horas.
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