La creciente epidemia de coronavirus está aislando a China, al igual Estados Unidos, hay otros países que están tratando de evitar infecciones o contener los brotes en sus territorios, que han decidido limitar la entrada a viajeros de China, mientras que compañías como Apple reducen los viajes y negocios allí.
El Reino Unido anunció el sábado que había retirado a todo el personal, excepto el esencial, de las embajadas y consulados en China, ya que las autoridades luego de que se confirmaran dos casos en Reino Unido: un estudiante de la Universidad de York y un pariente visitante.
El vicecanciller de la universidad, Charlie Jeffery, dijo que aunque entendía que los diagnósticos “causarían preocupación y ansiedad”, no interrumpirían los estudios. “Estamos trabajando estrechamente con la agencia líder, Public Health England y otras agencias para manejar esta situación”, dijo.
Los dos pacientes están ahora en cuarentena en Newcastle y la habitación del hotel de York en la que se habían hospedado ha sido desinfectada. La universidad dijo que no se cree que el estudiante haya entrado en contacto con nadie en el campus mientras tenía síntomas.
Las autoridades están tratando de rastrear a las personas que tuvieron “contacto cercano” con la pareja, lo que se define como pasar al menos 15 minutos a dos metros de la persona infectada.
En total, 203 personas han sido examinadas para la enfermedad en Gran Bretaña, y solo dos resultados han sido positivos. La gran mayoría de las infecciones y todas las muertes todavía están dentro de China, y se concentran en la provincia de Hubei. El sábado se habían confirmado 13 mil 968 casos y 304 muertes, 45 de ellas durante la noche en la provincia de Hubei. Pero la rápida propagación del virus más allá de las fronteras chinas ha aumentado el temor de que otros países puedan enfrentar brotes a gran escala, y muchos gobiernos están tomando medidas cada vez más fuertes para prevenir una epidemia en su territorio.
El sábado, Australia siguió a los Estados Unidos al imponer una prohibición de entrada a la mayoría de los viajeros de China. Canberra dijo que los ciudadanos, residentes o parientes aún podrían ingresar. Países como Uzbekistán y Vietnam cancelaron por completo los vuelos desde China.
Docenas de transportistas comerciales han reducido o interrumpido los vuelos a China, y varias cadenas de hoteles han dicho que permitirán cancelaciones por parte de viajeros chinos. Las principales empresas como Google y Facebook han prohibido los viajes al país, mientras que los minoristas internacionales como Starbucks y Apple han cerrado tiendas.
En Hong Kong, donde hay fuertes recuerdos del impacto del brote de Sars en 2003, miles de empleados del hospital se declararon en huelga, exigiendo que las autoridades cierren la frontera.
Gran Bretaña aún no ha impuesto prohibiciones similares, pero se están incrementando las precauciones. Ochenta y tres ciudadanos británicos que salieron de Wuhan el viernes pasaron ayer su segunda noche de dos semanas en cuarentena en el hospital Arrowe Park en Wirral.
La Universidad de Derby le pidió a un “número muy pequeño” de estudiantes que abandonaran Wuhan antes de que se impusieran restricciones para aislarse durante 14 días. Todos están bien actualmente.
El domingo se lanzará una campaña de salud pública en todo el Reino Unido para instar a las personas a usar pañuelos desechables y lavarse las manos regularmente para ayudar a detener la propagación del virus. El mensaje estará en anuncios en periódicos y en la radio y foros en línea que se sabe que son utilizados por ciudadanos chinos que viven aquí.
Se han detectado casos de transmisión de persona a persona, que han impulsado el rápido aumento de las infecciones dentro de China, en Alemania, Tailandia, Taiwán, Francia, Japón y los Estados Unidos.
“El verdadero problema ahora para el mundo es lo que sucede fuera de China”, dijo a la BBC Sir Jeremy Farrar, director de Wellcome Trust. “Lo que debemos tener en cuenta ahora es cuándo comienza a propagarse, si se propaga, en la comunidad o entre personas fuera de China. Y esa será la señal de que en realidad otros países pueden sufrir el mismo tipo de problemas que vemos en China “.
Dijo que la gravedad de un brote más amplio podría estar entre algo como la gripe estacional de invierno y “algo similar a lo que estamos viendo en China en este momento”.
“La incertidumbre en este momento significa que no podemos estar seguros de qué camino tomará esta epidemia”, agregó Farrar.
Con información de: The Guardian
