La Administración de Drogas y Alimentos de EEUU, lanzó este viernes una advertencia por el uso de hidroxicloroquina, un medicamento contra la malaria y que ha sido promocionado por el presidente Donald Trump, para ser usado en pacientes con COVID-19 fuera de hospitales y ensayos clínicos, ya que eleva los riesgos de provocar problemas graves del ritmo cardíaco.
La droga de décadas de antigüedad ha sido llamada por Trump como un “cambiador del juego” en la lucha contra el nuevo coronavirus. Las aseveraciones de Donald Trump acerca de que la hidroxicloroquina puede proporcionar beneficios a los pacientes, han estimulado las ventas de esta medicina.
El 19 de marzo pasado, Trump anunció que Estados Unidos se había abastecido con hidroxicloroquina. A las pocas horas, los expertos en la cadena de suministro farmacéutico informaron sobre la escasez cuando los médicos comenzaron a recetar hidroxicloroquina para ellos y sus familias. Los pacientes también han presionado a los médicos para que usen las terapias ampliamente promocionadas por Trump y otros partidarios.
La FDA dijo el viernes que estaba al tanto del aumento en el uso de hidroxicloroquina y cloroquina a través de recetas ambulatorias y que los medicamentos podrían causar ritmos cardíacos anormales y un ritmo cardíaco peligrosamente rápido. ( bit.ly/3cHvepp )
El anuncio de la agencia se produce un día después de que el regulador de drogas de la Unión Europea advirtió sobre los efectos secundarios de ambos medicamentos, instando a los profesionales médicos a controlar de cerca a los pacientes que los toman.
Todavía no hay evidencia del efecto de las drogas sobre el virus, COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, no tiene un tratamiento o vacuna aprobados.
La hidroxicloroquina también se asoció con un riesgo potencialmente mayor de muerte para pacientes en hospitales de veteranos de EEUU, Según un análisis presentado para revisión de expertos a principios de esta semana.
Rick Bright, el director derrocado de una agencia estadounidense encargada de desarrollar medicamentos para combatir la pandemia, dijo el miércoles que fue despedido porque pidió una investigación cuidadosa de las terapias.
Los riesgos del ritmo cardíaco pueden aumentar cuando los medicamentos se combinan con otros medicamentos, como el antibiótico azitromicina, así como en pacientes con enfermedad cardíaca y renal existente, dijo el viernes la agencia. ( bit.ly/2Y1gE8b )