La presidenta Claudia Sheinbaum recibió el bastón de mando de los pueblos indígenas y afromexicanos de México.
En el zócalo de la Ciudad de México una comitiva mujeres indígenas realizaron una ceremonia de purificación antes de entregar a la presidenta Sheinbaum el bastón de mando.
“Estamos de fiesta los pueblos, estamos de fiesta el hermoso país que se llama México”, dijo una de las participantes de la ceremonia.
Como parte del ritual las mujeres invocaron a los guardianes de sus comunidades para que brinden guía a Claudia Sheinbaum en su camino como la primera mujer presidenta del país.
“Pedimos vida, iluminación y sabiduría para la presidenta constitucional, doctora Claudia Sheinbaum Pardo. Pedimos para ella tu luz divina; que la acompañes, que la ilumines a cada paso que dé, en cada decisión que tome, a ella y a su equipo de trabajo”, dijo una de las participantes.
“Te pedimos, padre sol, que habites en su corazón, así como habitas en cada corazón de las niñas y las mujeres de este México. Te pedimos siempre luz en su camino, porque este rumbo es la fuente de la vida, de la energía, de la luz y de la sabiduría”, se pidió en la ceremonia.
“Señor, acompaña cuida y guía a nuestra presidenta constitucional, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo, cuida su camino y libérala de los males”.
“Presidenta, no está sola, estamos unidos todos los pueblos para seguir trabajando y poniendo en alto todos nuestros pueblos”, añadió una de las representantes.
Virginia, una representante de los pueblos indígenas, fue la encargada de explicar a la presidenta Sheinbaum el significado de la entrega del bastón de mando:
“Nuestras abuelas y abuelos nos enseñaron que el bastón de mando representa el poder político y espiritual, así como lo más sagrado de nuestra cosmovisión. Es símbolo del poder comunal del noble don de servir al pueblo y de hacer justicia. Con su simbolismo, las autoridades gobernamos obedeciendo al pueblo y ejerciendo el poder, cumpliendo el sagrado mandato de nuestras asambleas, espacio donde se unen nuestras voces y tomamos las decisiones de manera colectiva.”
En su intervención, Virginia agregó: “En esta nueva era, en este nuevo ciclo de la Cuarta Transformación de la vida pública nacional basada en el Humanismo Mexicano y en este lugar sagrado que es México Tenochtitlan, los pueblos indígenas y afromexicanos le entregamos con amor y esperanza el bastón de mando, seguros de que con su sabiduría y liderazgo habremos de construir una nación en la que pueblos indígenas y afromexicanos tengamos un lugar justo y digno, como lo mandata la nueva norma constitucional. Con su guía, haremos de México una verdadera casa para todos y para todas, y unidos honraremos nuestra grandeza lingüística, cultural e histórica”.
Al finalizar esta ceremonia, la presidenta Claudia Sheinbaum presentó sus 100 compromisos de gobierno.
