El presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró este domingo su compromiso para que México deje de comprar gasolinas en el extranjero y destacó una inversión de 60,000 millones de pesos para concluir con la construcción de una planta coquizadora en Tula, Hidalgo.
Durante su visita a la refinería de Tula este fin de semana, el mandatario federal supervisó el reinicio de las obras de esta planta coquizadora con la que se busca “eficientar el proceso de producción de combustibles”.
“Esta planta inició en el sexenio pasado, se paró por cuestiones de corrupción. Aquí estuvo metido el equipo de Odebrecht y encontramos cuando llegamos que la planta estaba inconclusa, emproblemada en lo administrativo, se le debía a las empresas y teníamos dos caminos, dos opciones: dejarla inconclusa o terminarla”, dijo López Obrador en un video publicado en sus redes sociales.
El jefe del Ejecutivo reiteró que los recursos para concluir con la construcción de esta planta no se obtuvieron a través de algún crédito. “Nada de crédito, puro presupuesto, todo lo que se logra porque ya no hay corrupción y por la austeridad republicana (…). Nada más póngase a pensar lo que significa para esta región, para Tula. Es reactivar la economía porque son muchos empleos, es trabajo, es bienestar para nuestro pueblo”, comentó el Presidente e insistió en que la construcción terminará a finales de 2023.
La importación de gasolinas en México llegó a un volumen promedio de 496,909 barriles diarios en el promedio de enero a septiembre de 2021, con lo que se incrementó en 5,393 barriles diarios en promedio en un año, además de que representó el 69% de la demanda y que una tercera parte de estas compras externas fue realizada por privados, cuando hace un año la participación fue de menos una cuarta parte.
Según los indicadores más recientes de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Secretaría de Energía (Sener), en el promedio de los tres primeros trimestres de 2021, la empresa estatal realizó compras externas de gasolinas por un volumen de 327,945 barriles por día, mismas que se redujeron en 15% en comparación con el mismo lapso del 2020, con un volumen de importación menor en 56,357 barriles por día.
En el video, la secretaria de Energía, Rocío Nahle explicó que luego de siete años de que inició este proyecto, su reactivación consiste en concluir con la planta coquizadora y construir dos plantas de hidrotratamiento.
Nahle detalló que esta planta coquizadora va a procesar el combustóleo de Tula y una parte de Salamanca.
Acompañado también del director general de Petróleos Mexicanos, Octavio Oropeza; el titular de la Secretaría de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O y el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández; el presidente López Obrador destacó el respaldo de trabajadores, técnicos, ingenieros y obreros para concluir con este proyecto de rehabilitación de la refinería de Tula y el resto de la infraestructura para la producción de combustibles en el país.
De enero a septiembre de 2021, la producción de petrolíferos de Pemex escaló 15.2% a 800,000 barriles diarios, su nivel más alto desde el 2017, cuando obtuvo 993,000 barriles diarios.
No obstante, el motor de dicho avance es la elaboración de combustóleo, que se incrementó nada menos que 46.3% a un nivel récord de 245,000 barriles diarios, convirtiéndose en el combustible más producido por Pemex, al contar por 31% de su producción total de petrolíferos.
