El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, afirmó este viernes que aceptar la creación de un Estado palestino sería un «suicidio nacional» para su país, y aseguró que quiere «terminar el trabajo» en Gaza «lo más rápido posible».
«Creo que tenemos un acuerdo» para poner fin a la guerra en Gaza, declaró por su parte en Washington el presidente de Estado Unidos, Donald Trump.
Aceptar un estado palestino sería un «suicidio nacional», entre otras cosas porque la Autoridad Palestina es «corrupta hasta la médula», aseguró Netanyahu.
En un mensaje dramático pronunciado en hebreo e inglés, Netanyahu se dirigió directamente a los rehenes retenidos por el grupo armado islamista Hamás, tras anunciar que las fuerzas israelíes habían instalado altavoces en Gaza para retransmitir en directo su intervención.
«No descansaremos hasta traerlos de vuelta a casa», dijo Netanyahu, que acusó a la comunidad internacional de permitir «mentiras antisemitas».
Israel quedó un poco más aislado esta semana con el reconocimiento de un Estado de Palestina por parte de países como Francia, Canadá, el Reino Unido, Australia y Portugal.
Al menos 151 de los 193 miembros de la ONU ya han dado ese paso, más simbólico que efectivo.
El gran auditorio de la ONU se vació en gran parte cuando Netanyahu subió al estrado. Otros delegados y público presentes aplaudían y vitoreaban al primer ministro.
«El boicot al discurso de Netanyahu es una manifestación del aislamiento de Israel y las consecuencias de la guerra de exterminio», afirmó en un comunicado Taher al Nunu, un alto cargo del comité político de Hamás.
Con información de: AFP



